«Quince metros puede ser muy lejos también, no?», dijo Buzz a Neil en el módulo lunar.
Y sintió en ese momento, la misma tristeza que se siente en navidad ese segundo antes de brindar.
E inmediatamente se puso a pensar en esa chica que limpiaba las oficinas de Houston, y se preguntó si
por casualidad ella había visto su traje en la televisión. Si sabía qué él, era quien la miró tantas veces desde esas frías
y blancas oficinas vidriadas preparar el café en silencio.Y deseó profundamente que ella sepa su nombre,
que sonría al escucharlo de la boca de los periodistas cada vez que se mencione «la conquista de la luna».
Y entonces deseó dormirse rápido, y soñar con un Citroen amarillo Alba, para en un periplo infinitamente más arriesgado,
pasarla a buscar y llevarla donde estaba él ahora. Y regalarle florcitas, y mostrarle lo lindo que se veía la tierra sin ellos dos,
y proponerle quedarse ahí para siempre; orbitando y haciendo el amor hasta morir de hambre.
El 28 de Julio.
LOS PERIPLOS y ALBA IRUZUBIETA
Ponete florcitas en el ojal en el pelo y venite a Casa Yatay
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